
El entorno adecuado para envejecer es en el hogar, aunque, en determinadas ocasiones, no es posible por las atenciones que se necesitan, entre otros aspectos. En este caso, los centros para mayores son clave y un gran soporte para toda la familia.
En una residencia para personas mayores se proporciona el mejor bienestar, ya que se brindan grandes servicios personalizados y una atención basándose en lo que se requiera. Cada residente recibe unos cuidados específicos, especialmente en cuanto a la asistencia sanitaria.
En la vejez, es habitual encontrarse con diferentes problemas de salud, físicos y mentales y, por ello, los centros para mayores son un apoyo clave.
¿Por qué se necesita una atención personalizada?
Existen muchos factores (físicos, psicológicos y sociales) que hacen que, al llegar a una cierta edad, se precise tener al lado a un equipo profesional que ofrezca ayuda en este sentido.
En cuanto a los factores físicos, puede existir un deterioro del cuerpo por envejecimiento, sufrir alguna enfermedad neurodegenerativa y tener una pérdida parcial o total de habilidades visuales, auditivas o motrices.
En relación con los factores psicológicos, pueden ser producidos por los trastornos del ánimo y baja autoestima, la depresión o las alteraciones de memoria, algo que afecta a mucha población mayor.
Y, por último, encontramos los factores sociales, que son aquellos que afectan a tener una falta de atención de su entorno, a vivir solos, a tener un hogar inadecuado, etc.
Todo ello, provoca que una persona pueda tener que residir en un centro para mayores, en el cual se sentirá respetada, querida, cuidada y respaldada en todo momento.
Es importante conocer bien estos aspectos para poder dar lo mejor y que se sienta a gusto en el centro de mayores. Es decir, una vez identificados, es esencial analizar qué tipo de atención van a requerir por parte del personal de una residencia para cuidar ancianos.
Y, ¿qué puede ofrecer una residencia a una persona mayor?
Los centros residenciales ponen a la disposición de los usuarios diferentes servicios enfocados a su persona, tales como una correcta alimentación. Basada en menús equilibrados y sanos, realizados por profesionales de nutrición y especialistas geriátricos, con productos de gran calidad y sabor.
Asimismo, realizan relaciones interpersonales estrechas con otros usuarios y con el mismo equipo de la residencia. Recibir y dar afecto y socializar es muy positivo siempre.
Tener a su lado a profesionales durante todo el día les ayuda a obtener mayor tranquilidad y seguridad por si se caen y no se encuentran bien. En resumen, están en un entorno afable y en unas instalaciones completamente adaptadas a ello, sin barreras arquitectónicas y que pueden controlar sin problema. Y, como no, tienen espacios más reservados, como su habitación, donde se sienten como en casa.
También encontramos muchas actividades que mejoran su autoestima y su ocupación durante cada jornada, además de ayudar a su mente y a su cuerpo. Las residencias cuentan con talleres, gimnasio y ocupaciones destinadas a la estimulación cognitiva.
En definitiva, un centro para mayores debe estar atento a lo que las personas puedan necesitar y proporcionar un soporte integral, para garantizar el máximo bienestar y que repercuta de manera óptima en su vida.
Residencia en Barcelona para personas mayores
En Residencia Barcelona cuidamos a cada residente para que esté a gusto y analizamos qué factor ha hecho que deba estar con nosotros para proporcionarle una atención más cercana.
Nuestro equipo experto se ocupa de que cada uno de ellos se sienta especial y único y se centra, no sólo en sus necesidades, sino en todo lo que puede aportar y hacer con nosotros.
Ayudamos a crear un ambiente social muy bueno para ellos y juntos, realizar muchas actividades enfocadas en su bienestar.